Adelitas, enfermeras y soldaderas

Adelitas, enfermeras y soldaderas

ENFERMERA MEXICANA ADELA VELARDE PÉREZ ADELA VELARDE PÉREZ, “LA ADELITA”

Adela Velarde, más conocida como “La Adelita” (la del corrido mexicano) y destacada activista de la Revolución Mexicana, nació el 8 de septiembre del año 1900, en ciudad Juárez Chihuahua, donde estudió sus primeras letras y posteriormente se hizo enfermera.

La vida de “La Adelita” traspasa las fronteras de la historia y la leyenda, pues al haber sido relatada por la voz popular ha dado lugar a opiniones basadas en fantasías unas veces y otras en el romanticismo popular. Se dice que “desafiando a su padre, un adinerado comerciante de ciudad Juárez, se incorpora a la Asociación Mexicana de la Cruz Blanca para desempeñarse como enfermera. Fue conocida por su eficiencia y destreza en la atención de los heridos, convirtiéndose en una figura muy popular entre las tropas”.

La asociación de veteranos de la revolución reconoció a “Adela Velarde Pérez, como enfermera, que desde 1913 militó en la División del Norte bajo el mando del General Carlos Martínez, así como en el ejército del Noreste en las regiones de Chihuahua, Zacatecas, Torreón, Aguascalientes, Distrito Federal y Morelos. Destacando su participación

en contra de la Usurpación Huertista, motivos por los que fue considerada, oficialmente, veterana de la Revolución el 22 de febrero de 1941 y miembro de la Legión de Honor Mexicana en 1962”.

Adelita atendía a los heridos villistas de la División del Norte, como parte de la Brigada de la Cruz Blanca que formó la señora Leonor Villegas de Manón. Al concluir la lucha armada, Adela Velarde Pérez, perfectamente identificada, recibió años después un homenaje como veterana de guerra. (1)

Las Rebeldes y la formación de la Cruz Blanca Mexicana. Publicado el domingo día 5 de febrero de 2012 (2)

Para algunos, se ha dicho, “es solo una leyenda, para otros es el personaje femenino con mayor proyección en la revolución mexicana”.

Adelitas o soldaderas

Adelitas o soldaderas

Según cuentan, y quedó guardado en la memoria de los tiempos, era una enfermera que a los 14 años militó en las tropas de Pancho Villa, donde el sargento Antonio del Río Armenta interpretaba en su honor, la canción “La Adelita”. Más allá de la leyenda o la realidad, algunas décadas después de terminada la revolución, Adela Velarde o “La Adelita”, quien trabajaba en una oficina pública, recibió una pensión como veterana de guerra, por su servicio a la revolución.

En la historia del pueblo de México, indudablemente, Adela Velarde, “La Adelita” forma parte de la pléyade excelsa de las mujeres mexicanas que desafiando a su tiempo, han contribuido a la reivindicación del papel histórico de la mujer. (3)

A pesar de su extracción social, se incorporó a la Revolución Mexicana y fue convirtiéndose en una figura muy popular entre las tropas, transformándose en el mito de “La soldadera” o “La Adelita” que la Revolución las formó como auténticas “guerrilleras” del movimiento armado.

Enfermeras voluntarias de La Cruz Roja 1914

Enfermeras voluntarias de La Cruz Roja 1914

Su nombre se hizo leyenda y su leyenda la convirtió en un corrido muy popular hasta nuestros días, y algunos afirman que fue el compositor el soldado herido atendido por la enfermera Adela, Antonio del Río quien le dedicó el popular corrido “La Adelita”; la canción que hizo popular la División del Norte en los años 1914 - 1915, durante la Revolución constitucionalista:

Si Adelita quisiera ser mi novia,

si Adelita fuera mi mujer,

le compraría su vestido de seda

para llevarla a bailar al cuartel.

Si Adelita se fuera con otro,

la seguiría por tierra y por mar:

si por mar, en un buque de guerra;

si por tierra, en un tren militar.

Distintas versiones han dado lugar a afirmaciones de que “Como se desconoce quién fue su autor”, se han originado diversas versiones acerca de su origen:

a) que la compuso un joven capitán: Elías Cortázar Ramírez probablemente veracruzano.

b) que es anterior a 1910, y su compositor, el sinaloense Ángel Viderique, y que basta observar su letra para convenir en que se originó en una población marítima, “la seguiría por tierra y por mar: si por mar, en un buque de guerra”, lo que a nadie se le hubiera ocurrido escribir en Durango o Chihuahua.

c) que surgió en abril de 1913, cuando las fuerzas revolucionarias de Maclovio Herrera, Rosalío Hernández y Manuel Charo tomaron la ciudad de Camargo, Chihuahua, defendida por el general Manuel García Pueblita y le dieron muerte.

d) que es una canción anónima que el general Domingo Arrieta y sus tropas le oyeron a unos músicos de rancho, en una de tantas incursiones por el estado de Sinaloa.

e) que el mismo Arrieta encomendó al maestro de su banda militar, Julián S. Reyes, que la escribiera e instrumentara, lo cual hizo puntualmente.

f) que Adelita fue una hermosa y diligente enfermera: Adela Velarde Pérez, oriunda de Ciudad Juárez, Chihuahua, que atendía a los heridos de la División del Norte, condecorada varias veces, y a quien se reconoció como veterana de la Revolución

Enfermeras de La Cruz Blanca en el quirófano

Enfermeras de La Cruz Blanca en el quirófano

También “Adelitas” o “soldaderas” fue un nombre que en general se dio a las mujeres que acompañaban en campaña a los revolucionarios de la División del Norte, y participaron en la Revolución Mexicana, en los contingentes militares de los distintos grupos revolucionarios. Muchas de ellas s e emplearon como soldados, ayudantes, cocineras y enfermeras.

Cada 20 de noviembre las niñas mexicanas se disfrazan de “adelitas” como parte de las actividades para la celebración del día de la Revolución Mexicana.

SU NOMBRE A LA CÁMARA DE DIPUTADOS

En fecha reciente, a iniciativa de los legisladores se presentó el proyecto de decreto, para inscribir con letras de oro en el muro de honor del Palacio Legislativo de San Lázaro los nombres de Adela Velarde Pérez y de Valentina Ramírez Avitia, que dice: “La suscrita Diputada Adriana Fuentes Cortés, integrante del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional en la LXI Legislatura de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión, con fundamento en lo dispuesto en los artículos 71, fracción II, de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, así como 55, fracción II, 56, 62 y demás relativos del Reglamento para el Gobierno Interior del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos, somete a consideración de esta soberanía la presente iniciativa con proyecto de decreto, por la que se inscribe con letras de oro en el Muro de Honor del recinto de la Cámara de Diputados, Palacio Legislativo de San Lázaro, los nombres de Adela Velarde Pérez y de Valentina Ramírez Avitia, con fundamento en la siguiente…” (Etcétera).

El proyecto de decreto según transcribe la Gaceta Parlamentaria, fue “Dado en el salón de sesiones de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, a 11 de agosto de 2010”. (4)

Adela Velarde Pérez, “La Adelita” destacada revolucionaria mexicana falleció en el año 1971 en los Estados Unidos de Norteamérica. (5)

¿Por qué los restos de Adelita están en Estados Unidos?

Descansan en Estados Unidos bueno porque ella vivió allí hasta que murió en 1971, el 4 de septiembre. Treinta años antes el 22 de febrero de 1941 la Secretaría de la Defensa otorgó en vida a Adela Velarde Pérez la Condecoración al Mérito Revolucionario y, veinte años más tarde, el 8 de diciembre de 1961 el Congreso de la Unión le concedió pensión vitalicia. 

Antonio Gil del Río Armenta fue el único corrido que compuso, nunca se casó, pero, Adelita tuvo un hijo de él, Antonio, quien murió sirviendo en la Segunda Guerra Mundial. Adelita acompañó Antonio durante los triunfos del Centauro del Norte hasta 1914, y luego en la llamada Batalla de Gómez Palacio el resultó herido de muerte, y ella todavía siguió como enfermera hasta la Batalla de Zacatecas, entonces dejó de pertenecer formalmente al Ejército. Con dificultades llegó a la Ciudad de México donde se empleo como mecanógrafa en la administración de correos número uno. 

Por esos años la buscó el Coronel, que también aparece en la canción... Hasta el mismo Coronel la respetaba... 

En 1965, Adelita llegó a la Ciudad del Río, Texas; se casó con él, con el Coronel Alfredo Villegas, que la respetaba y que era viudo. Ella llegó a ser muy amorosa con sus nietos. La doctora Elma Villegas, nieta del Coronel, dio información, documentos y fotografías que hicieron posible al doctor José Alberto Galindo Galindo, cronista de Zaragoza, escribir un libro titulado "Bajo un Cielo de Metralla, la Verdadera Historia de La Adelita" editado en 2008. 

Así es como se escribió la historia de La Adelita, la del corrido, y existió siendo todo un personaje de la vida real, y que vale mucho la pena recordar entorno a un aniversario más de la Revolución Mexicana. 

Adela Velarde Pérez nació en Ciudad Juárez, Chihuahua, justamente un día 8 de septiembre del año 1900. Dicen quienes la conocieron que heredó el carácter fuerte e indomable de su abuelo, el General Rafael Velarde, decidido partidario, pero además, amigo personal de Benito Juárez, a quien protegió de casa en casa durante su presidencia itinerante. 

El 20 de noviembre del 2014 la Secretaría de Relaciones Exteriores, a través del Consulado de México en Del Río, Texas, celebró ese día en el 104 aniversario del movimiento armado en la República Mexicana, y ahí tuvo lugar el primer homenaje oficial que se realizó a Adela Velarde Pérez, La Adelita.

El homenaje fue en el cementerio de San Felipe, ahí en Del Río, Texas, en Estados Unidos, donde más de 100 personas se juntaron en torno a su tumba le rindieron homenaje a la mujer cuya vida y entrega a la causa de la Revolución inspiró una de las canciones más conocidas de todo el repertorio musical en México, traducida, además, a varios idiomas. 

OTRAS VERSIONES

Existen varias versiones sobre el origen y la existencia de la Adelita, se dice que esta mujer en realidad se llamaba Marieta Martínez pero fue bautizada con el nombre de Adelita cuando anduvo con las tropas Villistas y murió en los combates contra Pascual Orozco.

También se dice que este personaje simplemente se trataba de Adela Velarde Pérez una enfermera que perteneció a la Cruz Blanca que atendía a los heridos de la división del oriente y se enamoró de uno de sus pacientes al ser atendido por ella misma.

La División del Norte al mando de Pancho Villa acosaba a las tropas concentradas en Tampico a las que pertenecía nuestro personaje y éstas se ven obligadas a salir de la ciudad para combatir. Por la noche durante algún descanso en la lucha, Cortázar Ramírez acompañándose de su guitarra, entonaba continuamente la canción “La Adelita” que los soldados norteños aprendieron y la hicieron suya. Cortázar murió en combate y la letra de su canción fue arreglada de forma que diera el último adiós a la ingrata amada. (6)

CORRIDO

Las canciones conocidas como corridos revolucionarios y películas han sido creadas para contar la historia de Adelita.

Los corridos y las versiones han cambiado dependiendo del público y la generación que la cante. Alguna de las versiones es la siguiente:

En lo alto de la abrupta serranía

acampado se encontraba un regimiento

y una moza que valiente los seguía

locamente enamorada del sargento.

Popular entre la tropa era Adelita

la mujer que el sargento idolatraba

y además de ser valiente era bonita

que hasta el mismo Coronel la respetaba.

Y se oía, que decía, aquel que tanto la quería:

Y si Adelita quisiera ser mi novia

y si Adelita fuera mi mujer

le compraría un vestido de seda

para llevarla a bailar al cuartel.

Y si Adelita se fuera con otro

la seguiría por tierra y por mar

si por mar en un buque de guerra

si por tierra en un tren militar.

Y después que terminó la cruel batalla

y la tropa regresó a su campamento

por la vez de una mujer que sollozaba

la plegaria se oyó en el campamento.

Y al oírla el sargento temeroso

de perder para siempre su adorada

escondiendo su dolor bajo el reboso

a su amada le cantó de esta manera…

Y se oía que decía

aquel que tanto se moría…

Y si acaso yo muero en la guerra,

y mi cadáver lo van a sepultar,

Adelita, por Dios te lo ruego,

que por mí no vayas a llorar.

Adela en el Museo Nacional de la Revolución, México. Enfermeras de Monterrey

Adela en el Museo Nacional de la Revolución, México. Enfermeras de Monterrey

BIBLIOGRAFÍA

(1) Leonor Villegas de Magnón Papers, archivo personal, programa Recovering the U.S. Hispanic Literary Heritage, Universidad de Houston, Texas.

(2) Las Rebeldes. Mónica Lavin. Editorial Grijalbo. México, octubre 2011.

(3) La lucha armada. Historia general de México. 1981

(4) Gaceta Parlamentaria, fue dado en el salón de sesiones de la Comisión Permanente del honorable Congreso de la Unión, a 11 de agosto de 2010

(5) Raúl Espinosa Gamboa. Cancún, Quintana Roo. México. Revista Esperanza

(6) Mi pueblo durante la revolución. México, Dirección General de Culturas Populares 1985

Comentarios recientes

25.11 | 00:55

Jorge gracias, esa es la idea de este blog, compartir datos históricos y otros divertidos, siempre con la idea de cultura

16.11 | 05:32

Verdaderamente ilustrativo, gracias por compartir estas enseñanzas.

28.10 | 14:04

Leí hace años de una mujer a la que le habian desaparecido varios empastes y tenia esos dientes sanos.

Además, existen una serie de fotografias, de logos en vehículos, que atestiguan la veracidad.

23.10 | 15:49

Los Griegos ganaton a los Atlantes-Iberos.

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